De la afinidad con la naturaleza y lo natural resulta una armonía cómoda, desenvuelta, espontanea y relajada. ¿Cuantas conductas, objetos, adornos, artefactos… nos acompañan a lo largo del día y de la vida de los que podríamos prescindir? ¿Y si los fuésemos soltando uno a uno conscientemente, desprendiéndonos de tantos artificios?¿A quién beneficiaría?